¿En qué consiste la Ley de Segunda Oportunidad 2023?

David Palencia
Growth Hacker especializado en reputación online y en el Marketing de crecimiento con experiencia en Branded Content, SEO, SEM y estrategias innovadoras en grandes compañías de España y Latinoamérica.
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La Ley de Segunda Oportunidad es un mecanismo legal regulado por la Ley 15/2015, de 28 de julio, que permite a quienes arrastran deudas a las que son incapaces de hacer frente conseguir que se renegocien sus condiciones e, incluso, su cancelación definitiva, disminuyendo así la presión que supone para el deudor.

No se conoce mucho acerca de la Ley de Segunda Oportunidad, sin embargo se hace cada vez más mención a ella en relación a deudas y desahucios.

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Aunque en este artículo vamos a contarte todo acerca de cómo funciona esta ley, a quién va dirigida y qué requisitos son necesarios para poder beneficiarse de ella, en este enlace puedes consultar la Ley de Segunda Oportunidad de forma más detallada.

¿Qué es la Ley de Segunda Oportunidad?

La Ley de Segunda Oportunidad es un proceso administrativo que permite a una persona cancelar sus deudas por Ley.

Esta ley trata de solventar el problema de sobreendeudamiento de aquellas personas que, por algún tipo de experiencia profesional fallida o por cualquier otra circunstancia, se encuentran ante una deuda imposible de asumir.

Dirigida tanto a particulares como a autónomos, brinda la posibilidad de sobrellevar e incluso recuperarse de una mala situación económica, sin desatender los derechos de cobro de sus acreedores.

El objetivo principal es reparar o eximir de manera parcial la deuda, siempre y cuando el deudor no pueda de modo alguno satisfacer a sus acreedores y hacer frente a sus deudas, salvaguardando su derecho al honor.

¿Quién puede acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad?

La Ley de Segunda Oportunidad es un recurso legal al que pueden recurrir las personas físicas, ya sean particulares o autónomos, que no puedan pagar las deudas que han contraído.

Aunque se trata de un procedimiento prácticamente idéntico en ambos casos, la principal diferencia radica en que en el caso de particulares debe iniciarse el proceso ante un notario, mientras que en el caso de autónomos se iniciará en el Registro Mercantil o en la Cámara de Comercio que corresponda.

Si hablamos de empresas, en lugar de la Ley de Segunda Oportunidad se optaría por entrar en concurso de acreedores.

En España, para resolver este tipo de problemas con las deudas, se cuenta con la Ley Concursal y la Ley de Segunda Oportunidad.

La Ley Concursal permite al deudor reestructurar sus deudas a la vez que continúa con su actividad económica. Es decir, que si una empresa tiene deudas puede seguir trabajando de manera que se evitan el cierre de la empresa y el despido de sus trabajadores.

Por otra parte, la Ley de Segunda Oportunidad permitirá al deudor sanear su patrimonio. Una vez esté estable, podrá pagar a sus acreedores.

¿Cómo aplicar la Ley de Segunda Oportunidad?

Vamos a explicar en detalle cuáles son los pasos a seguir para presentar una solicitud de segunda oportunidad.

  • Lo primero que debes hacer es descargarte el formulario de solicitud del procedimiento para alcanzar un acuerdo extrajudicial que está publicado en el BOE.
  • Completa el formulario y adjunta la documentación requerida.
  • Acude al notario que te corresponda por localidad para que proceda a nombrar un mediador concursal. Acuérdate de llevar el impreso cumplimentado y la documentación necesaria.
  • Cuando el notario nombre un mediador, prepara y envía al mediador una propuesta de acuerdo extrajudicial de pagos para que la pueda enviar a tus acreedores.
  • Seguidamente, el mediador fijará una reunión. En ella estarán presentes los acreedores y el mediador concursal y a la que tú también deberás acudir.
  • Si se llega a un acuerdo en la reunión, el notario lo elevará a público. Por tu parte, deberás cumplir con el plan de pagos que se haya establecido.
  • En caso de no haber acuerdo, el mediador solicitará un concurso de acreedores. Aquí será necesario que te asista un abogado.
  • Cuando dé comienzo el concurso de acreedores, el juez nombrará como administrador concursal al mediador para que lo gestione.
  • Una vez finalice el concurso, bien porque se han liquidado tus bienes o bien porque no haya bienes que liquidar, podrás solicitar la liberación de toda o parte de tu deuda.

¿Cuánto dura el proceso de la Ley de Segunda Oportunidad?

Es complicado indicar con exactitud cuánto tarda el proceso de la Ley de Segunda Oportunidad, puesto que influyen factores que están fuera de tu control, pero vamos a intentar darte una orientación aproximada de lo que podría durar.

Se debe tener en cuenta que algunos aspectos, como el tiempo que tarde el mediador concursal en aceptar el cargo, no dependerán de ti. Por eso es importante que trates de acelerar aquellos que sí dependen de ti directamente, como por ejemplo tener disponible toda la documentación que se te requiera o la contratación del abogado.

Por tanto, en una primera fase preparatoria se llevará a cabo la contratación de un abogado y procurador.

El siguiente paso será que aportes la documentación a tu abogado para que pueda establecer la mejor estrategia procesal. Para agilizar esta fase te recomendamos lo siguiente:

  • Reúne la documentación personal necesaria. Hablamos del DNI, certificados de nacimiento y matrimonio, sentencias de separación o divorcio, libro de familia, etc.
  • Reúne la documentación económica. Nos referimos a las nóminas y rentas, certificados del Registro de la Propiedad, cuentas bancarias, declaración de impuestos, contratos de compraventa, etc. Es importante también que notifiques tus gastos mensuales, especialmente si eres propietario y quieres intentar proteger tu vivienda habitual.
  • Ten preparado un listado de acreedores detallando tus deudas todo lo posible.

En total esta segunda fase no debería ir más allá de un mes.

Acuerdo Extrajudicial de Pagos (AEP)

Aquí encontramos el primer obstáculo.

Una vez hayas preparado el expediente tendrás que acudir al notario. Este deberá llamar a un mediador concursal y, debido a que estos profesionales suelen recibir una remuneración muy baja, muchos rechazan aceptar el cargo.

Una vez el mediador acepte el cargo, tramitará el acuerdo extrajudicial de pagos, cuya duración puede alargarse hasta 2 meses.

Es decir, que esta etapa mínimo puede tardar entre 3 y 4 meses, aunque lo habitual es que esté resuelta en menos de 6 meses.

La parte positiva es que si el Acuerdo Extrajudicial de Pagos tiene éxito, habrás finalizado la tramitación del procedimiento, que solo se reabrirá si incumples el plan de pagos establecido.

Sin embargo, cuando el AEP no tiene éxito tendrás que solicitar el Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho (BEPI).

¿Qué es el BEPI?

Esta debería ser la última etapa del procedimiento de segunda oportunidad.

El Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho (BEPI) es una de las principales ventajas que la Ley de Segunda Oportunidad ofrece al deudor de buena fe y consiste en que, si una vez vendidos todos los bienes del deudor, no son suficientes para el pago de sus deudas, el importe pendiente se exonera, es decir, se cancela para siempre.

El beneficio de exoneración te permite cancelar las deudas que no puedes pagar. En algunos casos será un proceso instantáneo, mientras que en otros dependerá de un plan de pagos que dura 5 años.

En esta situación, podrías tardar unos 3 meses en gestionar esta última fase del procedimiento de segunda oportunidad que podría llegar a alargarse hasta 6 o 7 meses.

En resumen, desde el momento en el que decides acogerte al mecanismo de segunda oportunidad hasta que se aprueba un acuerdo extrajudicial de pagos, pueden pasar de 4 a 7 meses.

Si no hubiese acuerdo y te acogieses al beneficio de exoneración, este plazo se podría ampliar de 10 a 14 meses.

Y, solo en caso de quedar sujeto a un plan de pagos, habrá un proceso posterior de control de su cumplimiento que durará otros 5 años.

Requisitos de la Ley de Segunda Oportunidad

Básicamente, estos requisitos se reducen a estar considerado un deudor de buena fe. ¿Y qué quiere decir esto exactamente?

Se tendrá en cuenta el pasado del deudor insolvente para verificar su historial crediticio. Así, no se podrán acoger a la Ley de Segunda Oportunidad los «malos pagadores». También se tendrá en cuenta el futuro, ya que se precisa un compromiso por parte del deudor.

De ahí que la Ley de Segunda Oportunidad sea una vía de escape para aquellos «buenos pagadores» que simplemente están atravesando un mal momento económico protegiendo su derecho al olvido.

Por tanto, los requisitos necesarios para acogerse a esta Ley son los siguientes:

  • El interesado debe ser transparente y actuar de buena fe. No se podrá beneficiar de este recurso dos veces en los últimos 10 años y tampoco si se ha rechazado una oferta de empleo adecuada en los últimos 4 años. No se puede falsificar ni ocultar la documentación que le sea requerida.
  • No haber sido condenado por delitos contra Hacienda, contra la Seguridad Social o contra los derechos y libertades de los trabajadores en los últimos 10 años. Cabe destacar que se tendrán en cuenta los antecedentes penales de los últimos 10 años.
  • Que haya satisfecho los créditos contra la masa y los privilegiados. Se consideran créditos contra la masa los originados con posterioridad a la declaración de concurso, como gastos de notario y abogado, y los privilegiados son hipotecas y deudas con la Agencia Tributaria y la Seguridad Social. Este requisito puede decaer siempre que se demuestre que los créditos se intentaron pagar.
  • No haber sido declarado culpable en un concurso de acreedores.
  • La deuda no puede superar los cinco millones de euros.
  • Que acepta ser incluido en el Registro Público Concursal, para que aquellos acreedores que tengan interés legítimo puedan averiguar la situación en la que se encuentra.

Conclusión

La Ley de Segunda Oportunidad es un recurso legal que ofrece a particulares y a autónomos la posibilidad de renegociar e incluso eliminar de forma total o parcial sus deudas cuando no es posible hacer frente a su pago.

Gracias a la existencia de la Ley de Segunda Oportunidad se puede superar una mala situación económica que haya venido provocada por un endeudamiento excesivo sin por ello descuidar los derechos de cobro de los acreedores.

Esperamos que este artículo sobre la Ley de Segunda Oportunidad ayude a entender mejor cómo funciona. Si tienes alguna duda acerca de este tema o quieres contarnos tu situación particular, no dudes en dejarnos tu comentario o ponerte en contacto con nosotros. Estaremos encantados de ayudarte.

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